Recuperándose de las pérdidas de esta vida
Introducción
Muerte, es una palabra difícil de pronunciar, cuando este sale de la boca de un ser querido, lo único que queremos es que deje de hablar de ello e inmediatamente cambiamos de tema, esto por que no estamos preparados para que un ser querido descanse antes que nosotros.
No obstante, hemos tenido que hacer frente a la muerte y más aún en estos tiempos de pandemia en el que muchas familias perdieron a uno o más seres queridos.
Este material está pensado en ti, que estas atravesando el proceso de duelo y que quizá no has encontrado aún el camino correcto por el cual seguir, permíteme acompañarte mientras pasas por este proceso.
«El proceso del duelo hay que pasarlo con paciencia en el dolor»
¿Qué es el duelo?
El duelo es el conjunto de pensamientos, sentimientos, conductas que asumimos cada vez que tenemos una pérdida o que tenemos que hacer cambios radicales en la vida
¿Qué necesitamos saber sobre el duelo?
Cuánto más significativa la pérdida, más intensa será el duelo. Sin embargo, aún, las pérdidas más sutiles pueden llevar al duelo.
Por ejemplo, puedes experimentar duelo después de haber salido de casa, graduarte de la Universidad, cambiar de trabajo o jubilarte de la carrera que tanto amabas.
«El que encubre su dolor no encuentra remedio para el»
Proverbio Chino
MITOS SOBRE EL DUELO
El dolor se irá más rápido si lo ignoras.
El Hecho: tratar de ignorarlo o tratar que salga a la superficie solo hará que empeore a la larga. Para una verdadera recuperación es necesario encarar el dolor y tratarlo en forma activa.
Es importante “ser fuerte” frente a la pérdida.
El llorar no significa que seas débil. No necesitas “proteger” a tu familia o amigos colocando una pared de valiente. El mostrar tus sentimientos verdaderos los ayudará y a ti también.
Si no lloras, es porque no tienes pena por la pérdida
Hecho: El llanto es una respuesta normal a la tristeza, pero no es la única.
Aquellos que no lloran puede que estén sintiendo el dolor tan profundo como otros. Solo que su forma de demostrarlo es diferente.
El duelo debe durar alrededor de un año.
Hecho: No existe un período de tiempo para el duelo. Cuánto tiempo tome puede diferir de persona a persona.
«Extrañar no es estar vacío, sino estar lleno de alguien que se hace presente a pesar de la ausencia»
¿Cuáles son las etapas del duelo?
Todas las personas que están el proceso de duelo, pasan por estas etapas, unos más rápido, otros más lento, pero es un camino que nos toca recorrer.
Mientras eso pasa, es importante buscar ayuda si no logramos pasar a la siguiente etapa y te nos estancamos, hay varios profesionales especializados en este tema que harán que ese camino a recorrer sea más llevadero.
“Qué hacer y qué no hacer para reparar un corazón que sufre”
COSAS QUE PODEMOS HACER
Es importante estar para la persona en estos momentos difíciles.
Ayúdelos a aceptar la realidad de la pérdida
Es necesario ayudarles a aceptar la pérdida del ser amado, haciendo que la persona se sienta apoyada y protegida por nosotros.
Las personas en primera instancia no asimilan que la persona ya no está, por ello debemos hacer el acompañamiento hasta que sea consciente y tenga las fuerzas para continuar solo o sola.
Ayúdelos a expresar sus sentimientos
Es importante darle espacio para que exprese como se está sintiendo, es nuestra labor escuchar activamente y ser cuidadosos con las palabras de consuelo que vamos a usar. En estos momentos la persona necesita un hombro sobre el cual descargar todo el olor que tiene y sentirse apoyado.
Utiliza la comunicación no verbal
Esto para transmitir tranquilidad y confianza: movimientos pausados, tono de voz afectuoso, bajo y sereno.
COSAS QUE PODEMOS HACER
Es importante estar para la persona en estos momentos difíciles.
Escuchar el 80% y hablar el 20%
Escuchar no es:
-Confrontar o decir tu opinión de manera agresiva,
“síndrome del experto”
-Interrumpir constantemente a quien está hablando
-Dar consejos
-Juzgar a quien está hablando
-Echar la culpa a quien habla
No echar mano de los tópicos
Expresiones como “no te preocupes”, “ya saldrás adelante”, “tienes que ser fuerte”, “esto pasa pronto” u otras parecidas solo provocan un sentimiento de lejanía en la persona que está sufriendo la pérdida, porque siente que no se comprende su dolor.
No intentar animar
No es reconfortante recordar al superviviente todo lo bueno que aún le queda: hijos, salud, hacienda, “toda la vida por delante”, etc. En esos momentos poco importa lo que se tiene.
«Mis pies querrán caminar hacia donde estás durmiendo, pero seguiré viviendo»
Pablo Neruda
COSAS QUE PODEMOS HACER
Es importante estar para la persona en estos momentos difíciles.
– Ayúdelo a organizar su vida sin el fallecido (buscar trabajo, una nueva casa…)
– Ayúdele a deshacerse de las cosas del fallecido cuando la persona esté lista
– Ayúdele escuchando las historias que la persona desea contar.
– Aliéntale a que comparta sus recuerdos si así lo desea
«Cada pérdida tiene un número concreto de lágrimas… y hay que gastarlas»
Cortez
DUELO EN TIEMPOS DE PANDEMIA
La despedida no es posible, con esta pandemia el dolor intenso se ha complicado por las normas de aislamiento que impiden el contacto físico habitual, falta la calidez del entorno, impidiendo la socialización de procedimientos que han de realizarse en la soledad de una vivienda.
Es imprescindible que las familias se unan para darse consuelo, hacer una carta de despedida es una buena opción para despedirse de la persona amada. Escribir sobre el vínculo que se tuvo con la persona que ya no está y cómo queremos que siga presente en nuestra vida, cuales son mis sentimientos y emociones o qué necesito.
LIZETH PEREZ
Psicóloga
Terapeuta de Familia y Parejas
